La tendencia hacia un ciclismo electrónico (o incluso eléctrico) y digital, va en contra de mi idea de ciclismo y es un camino que detesto, pero probablemente sea imparable y no hay que negar la evidencia. Pero… ¿Es este manillar un anticipo de lo que se convertirá en un estándar o es un bluf?

Probablemente si tienes una bicicleta de titanio te hayas hecho esta pregunta, dado que estamos hablando de 65€ + Portes frente a 15€ y necesitarás 2 ó 3 para tu bici y se trata de un elemento muy sencillo.

El catálogo de bolsas de cuadro (Top tube bags en el idioma de Mr. Trump), es inabarcable y la diferencia entre modelos a partir de un mínimo de calidad, pasa por matices y gustos personales. Pero estas diferencias se vuelven relevante en el momento en el que la bolsa va a ir atornillada al cuadro y ahí es donde las mejores marcan la diferencia.

Me gustaría comenzar afirmando que tu culo no tiene precio, pero todos sabemos que lo tiene… Pero ¿Qué precio le pones tú? Han transcurrido más de dos siglos desde el invento de la bicicleta, originalmente conocida como “Drasiana”, o “máquina andante” y seguimos recurriendo a culotes para que la experiencia de montar en bici, especialmente con enfoque deportivo, no sea una tortura.

Si como como a mi te genera bastante pudor el pestilente hedor que propaga tus nada económicas prendas de correr tras 2 puestas, te gustará saber que no estás solo y hay opciones en el mercado.

El mercado ofrece multitud de opciones y no es sencillo, ni hay muchas referencias respecto a cuales son mejores, o peores y sinceramente, salvo que vayas a hacer bikepacking, o dar la vuelta al mundo y además seas muy manitas, la mayor parte de las opciones que incorporan te sobran y más si la necesitas por ejemplo para llevar en una carrera.

No se le suele dar mucha importancia, pero es un elemento importante para el ciclista. Que sea cómodo de manipular, que quede bien ajustado en el portabidón, que salga un buen flujo de líquido con facilidad y que no pierda agua cerrado y te ponga perdido son cuestiones importantes. Pero aún más que no acumule bacterias, que el agua te sepa a charca, que en verano cuando estés al borde del golpe de calor lo sea como tomarse un consomé y que en invierno no te entre en la tripa como un puñetazo de Topuria.