
En los últimos años se ha vivido una inesperada y particular revolución en el atletismo gracias a la incorporación de entresuelas de carbono, que han traído consigo mejoras notables en los tiempos de atletas profesionales y amateurs. Salvo esta r-evolución, el resto de ganancias han venido de la mano de mayor conocimiento sobre nutrición y entrenamientos.
No obstante, ya sea exclusivamente por intereses económicos, por la ambición de mejorar más el rendimiento, o por una combinación de ambas cosas, hemos visto como han ido surgiendo algunas iniciativas tecnológicas que con mayor o menor éxito se están incorporando – en profesionales primero y en amateurs después – al mundo del running.
Como aficionados, debemos mantener siempre una mentalidad abierta y curiosa a las nuevas soluciones, pero… ¿Nos están vendiendo la moto? ¿realmente mejoraré mi rendimiento? ¿Molaré mucho más?
Hoy os traigo los 3 artículos que considero han despertado más curiosidad y por supuesto destacan por algo esencial para este blog, como es el de el precio prohibitivo:
Banda refrigerante para la cabeza OMNIUS HeadBand

Partiendo del módico precio de 239€, podemos disfrutar de una banda que nos ayudará a mantener nuestra masa encefálica en su volumen recomendado para evitar sufrir un ictus mientras corremos a 40º, gracias a la incorporación de «cooling pieces» que en español se traduce como «cositas que dan sensación de fresquito a precio de los brillantes que simulan».
Bueno, pues para evitaros el disgusto, os adelanto que no hay estudios que evidencien la eficacia de este invento, aunque hay una garantía del 100% de dar una imagen espantosa corriendo con el cacharro. A su favor, no hay estudios en contra y corres más fresco.
Sensor de temperatura CORE

Hoy somos conscientes del impacto en el organismo y el rendimiento de un aumento en la temperatura corporal excesiva. Por eso es fundamental disponer de información precisa, para en caso de ser consciente a través de alertas de haber superado ciertos límites, poder tomar acciones como por ejemplo meterte en el congelador más cercano, o consumir nitrógeno líquido. Más allá de esta utilidad que para el aficionado es extremadamente práctica y a la que podrás acceder por tan solo 300€, te permite conocer el grado de adaptación al calor, que si puede ser de utilidad si tienes pensado participar en una competición con unas características concretas.
No lo catalogaría de gran revolución, pero te permite conocer algún dato más de desempeño, se puede utilizar sobre tu banda de pulsómetro y no haces el ridículo como con la banda de la cabeza.
Last but not least, encontramos el Medidor de potencia STRYD

La potencia como unidad de medición en ciclismo supuso un antes y un después en el ciclismo y si bien no está teniendo la misma aceptación que tuvo en este, disfrutar de métricas de fuerza que complementen a las actuales de pulsaciones, cadencia y velocidad, me parece que apoyadas en soluciones de IA nos podrán dar aportar una información útil sobre el desempeño en una carrera, o entrenamiento. El tiempo lo dirá, pero si tuviera que apostar por una de estas tres soluciones, sería esta y su precio visto lo visto, podríamos bautizarlo como el estándar «running coin» RNC, de 250€.
Recomendación del autor: Si os han llamado la atención, decidiros por uno… Nunca los 3 a la vez. Puedes tener capacidad económica para adquirirlos de golpe, pero nadie te habrá preparado para dar tantas explicaciones.